Cuando hablamos de gestionar correctamente los residuos, separar, reducir, reutilizar o reciclar y ser más sostenibles es habitual pensar en qué material debemos depositar en cada contenedor. Sin embargo, pocas veces nos paramos a pensar en todo lo que podemos hacer antes de generar residuos.
Hoy vamos a hablarte de cómo evitar el desperdicio alimentario te ayudará a gestionar menos residuos y también a ahorrar un dinero en la cesta de la compra. ¿Has pensado cuánta comida tiras a la basura porque está en mal estado?
Se calcula que en España se desperdician 31 kilos de alimentos por persona al año. Esta cantidad equivale a 250 euros y si te preguntas cuál es la huella de carbono que deja el desperdicio alimentario: el 8% de los gases efecto invernadero.
Es por ello que el desperdicio alimentario tiene unos costes ambientales y sociales muy altos en toda la cadena alimentaria. Sin embargo, en Tú Eres La Llave vamos a enseñarte como evitar el desperdicio alimentario y sacar el máximo partido a tus comidas de temporada. ¡Vamos allá!
Consume productos de temporada
Incluye en tus recetas de verano productos de temporada, de esta manera estarás aprovechando al máximo los recursos de la zona. Utiliza verduras y hortalizas para elaborar gazpachos o pistos. Y, ¿por qué no? Elabora cremas frías para tus menús de verano que den un respiro a estos meses sofocantes.
Los gazpachos son una buena oportunidad para incorporar frutas como sandía, fresas o melón que aporten sabor y frescor a este plato tan recurrente en verano.
Otra opción es elaborar tus propios escabeches con productos de temporada y envasarlos en conserva para consumirlos más adelante. Pueden conservase durante varios meses e incluso pero recuerda utilizar botes esterilizados y una elaboración cuidadosa para evitar que se estropee.
¿Frutas o verduras feas?
Cuando tengas frutas demasiado maduras en casa ¡No las tires! Siempre son una buena opción para disfrutar en cualquier momento del día. En su lugar, te aconsejamos aprovechar la fruta con peor aspecto para hacer batidos o zumos de fruta (incluso puedes incluir verduras).
Otra magnífica opción es elaborar mermeladas o almíbares que también pueden conservarse durante mucho tiempo si lo haces de manera correcta.
Y, ¿por qué no? Ahora que estamos en verano también puedes utilizar los plátanos maduros para hacer helados. Solo tienes que congelarlos y combinarlos con otras frutas o con leche.
De igual manera puedes aprovechar las verduras y hortalizas para elaborar salsas, cremas o hacer un delicioso wok.
Por ejemplo, si tienes tomates demasiado blandos como para incluirlos en una ensalada es momento para hacer un buen sofrito que sirva de base para cualquier otro plato: carnes, arroz, legumbres, etc. Además, podrás aprovechar otras verduras para darle más sabor a tu salsa. Otra ventaja es que puede conservarse en el frigorífico durante varios días, incluso, en el congelador.
Planifica tus compras
Reducir el desperdicio alimentario no solo podrás conseguirlo en la cocina, también dedicando tiempo a planificar tus compras. Consume de manera consciente para evitar el exceso de comida y su deterioro.
Antes de hacer la compra elabora tus menús semanales y los ingredientes que necesitas para cada uno de ellos. También puedes planificar tus comidas de tal manera que aproveches un producto para varias elaboraciones. De esta manera no solo reducirás considerablemente la cantidad de alimentos que desperdicias sino que también ahorrarás y reducirás tu huella de carbono.
Por último, recuerda que los residuos de comida (biorresiduos) van al contenedor marrón.