Consumo consciente en verano

¡Mantén tu consumo energético bajo control este verano!

En verano puedes optimizar tu consumo a la vez que reduces tu huella de carbono.

Con la llegada del verano y las altas temperaturas, el uso de aparatos eléctricos y electrónicos se incrementa significativamente. Aunque estos dispositivos nos proporcionan comodidad y entretenimiento, también son responsables de un aumento en el consumo de energía. Es fundamental que tomemos conciencia de la importancia de controlar nuestro consumo energético durante esta época del año para reducir el impacto ambiental, además, evitarás sorpresas en la factura de electricidad.

Controlar el consumo energético durante verano ayudará a reducir la huella de carbono. Solo hay que introducir pequeños hábitos en nuestro día a día. ¡Toma nota!

Cómo controlar el consumo energético en verano

Conoce tu consumo energético

    Antes de tomar medidas para controlar el consumo energético, es esencial comprender cuánta energía están utilizando tus aparatos eléctricos y electrónicos. Consulta la etiqueta de eficiencia energética de tus dispositivos para conocer su consumo en vatios o kilovatios-hora. Esto te permitirá identificar aquellos dispositivos que son más demandantes y tomar decisiones informadas.

    Opta por dispositivos eficientes:

    Si tienes la oportunidad de adquirir nuevos electrodomésticos o dispositivos electrónicos, elige aquellos que cuenten con una clasificación de eficiencia energética alta. Los aparatos más eficientes consumen menos energía y te ayudarán a ahorrar en tus facturas.

    Apaga y desenchufa:

    Muchos dispositivos electrónicos siguen consumiendo energía aunque estén en modo de espera. Apaga completamente los dispositivos cuando no los estés utilizando y desenchúfalos si no los necesitas durante un período prolongado. Además, utiliza regletas con interruptores para desconectar varios dispositivos a la vez, lo que facilitará el ahorro energético.

    Aprovecha la luz natural:

    Durante el verano, los días son más largos y la luz natural está presente durante más horas. Aprovecha al máximo esta luz para iluminar tus espacios en lugar de depender exclusivamente de la iluminación artificial. Abre cortinas y persianas para dejar entrar la luz solar y evita encender luces innecesarias durante el día.

    Ajusta el termostato:

    El aire acondicionado es uno de los mayores consumidores de energía durante el verano. Asegúrate de mantener tu termostato a una temperatura adecuada y evita establecerlo en niveles excesivamente bajos. Por cada grado que aumentes en el termostato, podrás ahorrar hasta un 10% en el consumo de energía de tu aire acondicionado.

    Programa tus electrodomésticos:

    Muchos electrodomésticos, como lavadoras, secadoras y lavavajillas, cuentan con funciones de programación. Aprovecha esta característica para utilizar tus electrodomésticos en los momentos del día en que la demanda energética sea menor, como por la noche. Además, asegúrate de cargar completamente tus electrodomésticos, como la nevera, para que funcionen de manera más eficiente.